En la calle Ortega y Gasset, en pleno barrio de Salamanca de Madrid, Mayúscula Estudio ha rediseñado una vivienda de más de 300 metros cuadrados, donde la elección meticulosa de elementos, acabados y materiales de gran diseño y alta gama definen la esencia de cada espacio.
Desde el estudio señalan que «la exclusividad se convierte en el punto central y el hilo conductor del proyecto, reflejando un equilibrio exquisito entre funcionalidad y sofisticación. La vivienda cuenta con amplio recibidor, tres dormitorios en suite, cocina, salón-comedor, baño de cortesía y un estudio polivalente con baño incorporado. Cada detalle ha sido pensado para crear una atmósfera donde los toques llamativos van surgiendo para fusionarse con la neutralidad, sobriedad y calidad de cada rincón».
Conocedores del impacto que el arte aporta en el interiorismo de un hogar, esta vivienda se convierte en una galería, «donde cada obra, ya sea cuadro, escultura o fotografía, añade un extra de exclusividad y refinamiento». Ejemplos de ello son los lienzos de Mónica Baquedano y las esculturas y cuadros de Gerard Maló que adornan el salón-comedor, pasillo, baños y dormitorios, así como las fotografías de YellowKorner que personalizan el dormitorio principal.
Pensada para generar confort y bienestar, la vivienda respira nociones de la filosofía feng shui al «priorizar la fluidez, el equilibrio y la armonía en cada espacio». La distribución está creada para optimizar la luz y el tránsito; se utilizan materiales naturales, como madera, mármol o vegetación natural; y las formas curvas predominan tanto en mobiliario como en diversos detalles arquitectónicos. Asimismo, se combinan colores neutros con toques vibrantes, como, por ejemplo, el rojo y el verde, generando un equilibrio perfecto entre serenidad y vitalidad. «Al entrar a la vivienda, destaca un hall en el que se ha creado un cubo lacado de alto brillo, pensado como un espacio llamativo y elegante al mismo tiempo. Esta entrada, que se convierte en el corazón de la casa, no solo impresiona por su diseño, sino que favorece la circulación de la luz y el aire, y facilita la fluidez por el resto de los espacios, cuya línea es mucho más neutra y armoniosa», declaran los arquitectos e interioristas, José Manuel Fernández y Gerardo Malo.
Moderno y elegante, este piso se caracteriza por sus líneas limpias y una cuidadosa simplificación de los espacios. “Hemos eliminado el ruido visual suprimiendo elementos innecesarios, como las puertas iniciales que había en los pasillos, e incorporado puertas enrasadas y paneladas en dormitorios y baños, para alcanzar el enfoque estético deseado», explican desde el Estudio. Los baños han sido concebidos como lugares cálidos y acogedores para preservar la energía vital, añadiendo serenidad y calidez al conjunto. La sostenibilidad está muy presente en el proyecto mediante la instalación de calefacción por suelo radiante, domótica, sensores de movimiento para la iluminación y grifería ahorradora de agua.
Un hall sorprendente
Siendo el núcleo visual y emocional de la vivienda, el hall es sinónimo de modernidad y belleza. Diseñado para impresionar y conectar de manera fluida las distintas áreas de la casa, este espacio se distingue por sus panelados verticales de alto brillo en un sofisticado tono verde, evocando frescura y naturaleza. El suelo de mármol verde refuerza una verdadera sensación de envolvente.
Sobre el techo, una innovadora lámpara con cinta textil recorre el espacio, aportando un aire contemporáneo y versátil. Las embocaduras de las puertas de madera armonizan a la perfección con la celosía que enmarca la ventana existente. Como elemento destacado, un aparador en rojo brillante se alza como protagonista, inyectando energía y vitalidad. Este toque de color transforma el hall en una zona acogedora y llena de carácter, perfecta para recibir a los invitados.
Cocina: continuidad estética y contrastes elegantes
Originalmente, la cocina se conectaba directamente con el hall, pero siguiendo los principios del feng shui, se rediseñó para evitar que esta estancia fuera visible desde la entrada. Ahora, el acceso se realiza desde el salón-comedor a través de elegantes puertas correderas translúcidas con vidrio ahumado, que permiten separar los espacios sin perder luminosidad ni estilo, a la vez que garantizan privacidad cuando es necesario.
La protagonista de la cocina es una imponente isla de piedra en un sofisticado gris oscuro, a la que se anexa una mesa baja de madera, ideal tanto para decoración como para comidas informales. La mesa, en madera oscura, aporta una sensación de continuidad con los acabados y tonalidades del resto de la vivienda, mientras que la encimera y los aplacados, del mismo material que la isla, refuerzan la coherencia visual, creando una estética equilibrada.
Un impactante cuadro lámpara en rojo vibrante, ubicado sobre el fregadero, rompe con la neutralidad del espacio, aportando un toque de carácter inesperado y cautivador. Este contraste de color es fiel a la premisa del diseño, que busca sorprender con detalles únicos. El arte está presente en la cocina con una obra de Gerard Maló, colgada en la pared. Las baldas con espejo ahumado, junto a la ventana, juegan con los reflejos, añadiendo profundidad y dinamismo.
Las sillas oscuras; las cortinas de onda perfecta, presentes en otras estancias de la casa; y la elegante iluminación, liderada por una lámpara oval colgante, completan un entorno de estética continuada y bellos contrastes.
Salón-comedor: arte, juego de luces y detalles
El salón-comedor se muestra como un ambiente amplio, abierto y lleno de luz, donde los altos y blancos techos, así como la selección de obras de arte, crean un resultado final único. Algunos elementos estructurales, como la estantería integrada junto a la puerta que transita hacia el hall, se convierten en piezas de diseño por sí mismos. Funcionalidad y estética se dan la mano en cada rincón para hacer de este espacio un lugar acogedor y cálido, con detalles que enamoran a simple vista.
En la parte del salón, la elegante chimenea es el punto focal hacia el que se dirigen los dos sofás en una combinación rompedora de cuero y tela. Las butacas, tapizadas en piel y en un atractivo tono verde, combinado con estructura de madera, se ubican junto a la salida al hall, como elemento de conexión visual con el resto del recorrido. La mesa de centro de cristal y patas de color negro se complementa con una alfombra de textura original y grandes dimensiones. Sobre ambos sofás, destacan dos cuadros basados en las formas y la geometría: una es creación del artista Gerard Maló y “Verde en dos” lleva la firma de Mónica Baquedano para Línea Lateral. Iluminar ambas obras y darles mayor protagonismo es posible gracias a la iluminación focalizada del techo, instalada mediante rieles flexibles y magnéticos, que permiten crear tantos juegos y composiciones de luz como se desee. La variedad de colores en los textiles, con la presencia del verde, marrón, gris, rojo o una combinación negro-beige, siguen una filosofía armoniosa, complementada con la presencia de vegetación natural decorativa.
En la zona de comedor, una mesa de madera, con gruesas y curvas patas rojas, capta la atención, rodeada de lujosas y cómodas sillas de piel marrón. Dos escultóricas lámparas colgantes, compuestas de madera y pantallas textiles; dos hermosos espejos curvos sobre la pared, que reflejan la luz natural de las ventanas; y una escultura de acero y base de madera, ubicada en el suelo, añaden dimensión artística a la estancia.
Dormitorio principal
Todos los dormitorios de esta vivienda fusionan exclusividad, belleza y funcionalidad para originar espacios tan elegantes como prácticos. En el caso del dormitorio principal, este ha sido diseñado como un refugio acogedor, pensado para el descanso, el relax y la recarga de energía. A la entrada, un área de vestidor y un pequeño escritorio tipo vanity, compuesto por una mesa de madera en tono negro y silla que combina madera oscura y piel, ofrecen un lugar funcional y sencillamente bello, previo a adentrarse en el corazón de la habitación.
El diseño del dormitorio está enfocado a la creación de rincones personalizables, que los habitantes puedan hacer propios, como es el caso de la estantería y la mesa auxiliar, concebidas para suavizar la estética general y ser útiles, siendo perfectas para tomar un desayuno tranquilo, trabajar o depositar objetos personales.
La cama, protagonista del espacio, destaca por un cabecero extragrande y retroiluminado. La combinación de madera de roble y piel blanca texturizada añade un tacto agradable y suntuosidad. Las suaves curvas simbolizan recogimiento y calidez, una estética que se refleja también en las lámparas colgantes y de pared, así como en las dos mesitas de noche.
Las telas orgánicas escogidas juegan un papel clave al envolver el ambiente con tonos suaves, como el blanco o el gris, que transmiten serenidad, y un toque rojizo, que aporta fuerza y dinamismo. Dos fotografías presentes en la decoración vuelven a recordar que, en esta casa, el arte es un aspecto fundamental: la del escritorio y la estantería principal.
Segundo dormitorio: curvas elegantes, acentos verdes e iluminación creativa
El segundo dormitorio enfatiza las líneas fluidas y curvas elegantes, con un protagonismo absoluto del color verde. El cabecero, en un imponente verde petróleo, se convierte en el punto destacado, cuyas suaves ondulaciones aportan fuerza y personalidad. La iluminación juega un papel crucial, con una lámpara versátil ubicada sobre el cabecero, que permite ajustar sus luminarias según las necesidades, creando una luz flexible y creativa. A los pies de la cama, un daybed gris y hecho a medida añade funcionalidad, ofreciendo un rincón extra para descansar, una cama auxiliar o una superficie para depositar objetos. Frente a la cama, un robusto mueble de madera de roble, bajo un televisor empotrado, favorece la organización y personalización del espacio.
La cama, concebida como un lienzo en blanco, se viste con tonos suaves en azul y gris que aportan frescura y armonizan la decoración. La lámpara de sobremesa y las dos mesitas de noche, en madera negra, añaden distinción para hacer realidad una verdadera atmósfera que invita al descanso y la relajación.
Tercer dormitorio
Un carácter más desenfadado e informal es el que prima en este tercer dormitorio, sin perder ni un ápice de la elegancia y la sobriedad del resto de la casa. Dos camas independientes y elaboradas a medida, abrazadas por grandes panelados de madera en la pared, se disponen de manera distinta en la habitación, cada una con su propio espacio de recreo a sus pies: una cuenta con un banco; la otra, con una butaca azul y una mesa de apoyo. Detalles como las hornacinas de madera completan la funcionalidad del ambiente.
Los textiles de las camas, en blanco, se enriquecen con los colores azul y mostaza de cojines, que arrojan frescura y dinamismo. La sutil y elegante iluminación de lectura, invita a la desconexión y relax, mientras que la geometría y los colores del cuadro de Gerard Maló, sobre la pared, ofrecen una pincelada de arte y contemporaneidad.
Baños: cinco espacios wellness
En este proyecto, cada uno de los cinco baños existentes -cuatro en suite y uno de cortesía-, aunque con personalidades únicas, comparten un lenguaje estético coherente: adaptarse a las necesidades de los usuarios y ofrecer una experiencia sensorial que promueve el descanso y el bienestar. Cuidadosamente diseñados, combinan funcionalidad y belleza para ir más allá de lo puramente utilitario.
El baño de cortesía, en sintonía con la filosofía del hall de sorprender a todo el que llega, destaca por su gran carácter. Las paredes revestidas de madera oscura, de suelo a techo, marcan un camino sereno hacia el interior, donde predominan los tonos sobrios y oscuros. Un espejo ahumado en el techo amplía visualmente el espacio, mientras que el suelo y las paredes están revestidas en madera y mármol natural verde, igual que el hall, para alcanzar sintonía con el acceso y crear una atmósfera envolvente. El lavabo, de mármol, se asienta sobre una encimera negra, creando un contraste exquisito. Un espejo retroiluminado en la pared se complementa con una lámpara colgante de diseño industrial, añadiendo modernidad y estilo.
En el resto de los baños, predominan los tonos neutros que arrojan serenidad e intimidad. El diseño ligero, continuado, armónico y sofisticado se refleja en la presencia de mamparas de suelo a techo, con perfilería negra y vidrio acanalado, así como en los muebles de líneas limpias, en los que se combinan materiales como la madera natural y la porcelana de los lavabos. Los suelos de porcelánico en gran formato, así como los revestimientos de pared en el mismo material o en similares tonalidades de un texturizado papel pintado, aportan continuidad y suavidad visual. Las hornacinas iluminadas del interior de las duchas son elementos arquitectónicos que marcan la diferencia en cuanto al cuidado meticuloso de los detalles. La tecnología domótica, cuidadosamente integrada, reduce la presencia de elementos eléctricos visibles, ofreciendo un uso eficiente de la iluminación y otras funciones.
El baño anexo al dormitorio principal se convierte en un verdadero oasis privado, superando su función tradicional para convertirse en un auténtico spa de gran estética y practicidad. El mueble flotante y hecho a medida de madera aporta ligereza al espacio, mientras que los dos lavabos de porcelana que sobresalen añaden elegancia contemporánea. Un imponente espejo circular y enmarcado por dos lámparas de cobre, así como la grifería integrada de color negro, refuerzan su línea refinada y vanguardista. El banco de madera robusta se convierte en un elemento que permite descansar y hacer más acogedor el ambiente. Los radiadores toalleros muestran distinción sin sacrificar la funcionalidad del entorno. Las paredes revestidas con espejo ahumado oscuro, la pintura “B. 7” de Mónica Baquedano para Línea Lateral y la gran lámpara de diseño colgante, garantizan profundidad y carácter.
Estudio extra: diseño polivalente
Ubicado junto a la entrada, un estudio con baño propio es un espacio versátil que puede funcionar como zona de trabajo o de descanso. Un elegante sofá gris, que se transforma en cama, permite adaptarlo de forma sencilla a los requerimientos del momento. Con un diseño neutro y minimalista, cuenta con armarios escamoteables y lisos de suelo a techo, maximizando el espacio y la funcionalidad. Los suelos de madera, en perfecta sintonía con el resto de la vivienda, refuerzan la coherencia estética que impregna todo el proyecto. En este estudio polivalente, cada centímetro se aprovecha al máximo para ofrecer un entorno útil, acogedor y plenamente integrado.