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Industria

Las previsiones de Ascer para los próximos tres años en la cerámica de Castellón

El secretario general de la patronal cerámica, Alberto Echavarría, ha señalado en el Congreso de ATC que para el 2024 «esperamos sufrimiento» y ha asegurado que la recuperación de la demanda llegará en los años 2025-2026

18.11.2023 17:21

La economía mundial anda subida en una montaña rusa desde el estallido de la pandemia. Cuando se vislumbraba la victoria contra el coronavirus llegó la guerra en Ucrania, mientras que ahora el nuevo foco de inestabilidad está situado en Oriente Próximo. Todo esto afecta a un planeta globalizado, y de forma especial a un sector como la cerámica de Castellón, que vende al exterior las tres cuartas partes de lo que fabrica.

Esta incertidumbre no hace fácil establecer unas previsiones sobre el futuro, pero la mesa de debate que cerró el Congreso Internacional del Técnico Cerámico, desarrollada a lo largo de los dos últimos días en Castelló, aportó datos sobre cuál será la evolución del clúster azulejero, y cuáles son las posibles vías de salida a un momento delicado.

El secretario general de la patronal cerámica (Ascer), Alberto Echavarría, comentó que para el 2024 «esperamos sufrimiento», al no vislumbrarse una salida a la actual crisis de demanda de producto. «El año será complejo, por lo que nos ha pasado y por lo que nos pasa», en referencia a unos efectos de la crisis de costes energéticos que aún arrastra la industria, detalló.

«La inestabilidad global afecta a mercados como los de la Unión Europea, con economías estancadas y un parón en la construcción», dijo por lo que no será «hasta los años 2025-2026 cuando esperamos recuperar parte de la demanda». Además, apuntó que tanto España como Italia sufren una elevada regulación, lo que supone un lastre ante el avance de India, «que ahora es nuestro principal problema».

«El espejismo del 2021»

El CEO del grupo de esmaltes Altadia, Vicente Bagán, comentó que los grandes resultados del 2021 «fueron un espejismo, de modo que se ha vuelto a las cifras del 2018-2019, pero de una forma abrupta». Algo que atribuyó «a un cóctel de circunstancias», si bien «todo pasará, los tipos de interés bajarán y se retomará la construcción». Además, incidió en que el futuro traerá mejoras en la productividad, a falta de ver la evolución de los costes de materias primas y energía.

Para diferenciarse de sus rivales, Bagán introdujo la idea de deslocalizar. «No veo que las empresas españolas estén produciendo cerca de sus clientes», e incluso apuntó la posibilidad de producir en pasta roja para aportar diferencias al producto.

Ampliación de productos

El CEO de Sacmi Ibérica, David Gálvez, recordó que tras la crisis del 2008 la cerámica de Castellón salió a exportar. «Ya hemos dado la vuelta al mundo y ahora hay que tener un enfoque diferente», mencionó, por lo que el nuevo paso debería ser «superar el concepto de azulejo para entrar en otros terrenos» relacionados con los materiales para la construcción. Algo que ya hacen otras firmas del clúster.

Más allá del gas

La consellera de Medio Ambiente e Infraestructuras de la Generalitat valenciana, Salomé Pradas, apuntó que una de las posibilidades para crear valor añadido es la transición energética. Afirmó que la industria «cuenta con la Generalitat para afrontar este reto», especialmente a la hora de reclamar el apoyo de Europa, donde «no son conscientes de los cambios históricos que se han hecho en materia energética» para reducir las emisiones al mínimo que permite la tecnología vigente. Además, Pradas criticó que las ayudas del Gobierno «son insuficientes», y que los requisitos que se exigen para acceder a ellas, «hacen casi imposible su recepción».

Pradas recordó el proyecto de la Generalitat para agilizar trámites y ahorrar burocracia en aspectos como la concesión de autorizaciones ambientales integradas, «lo que frena inversiones y empleos»; y mencionó el proyecto del Eje de la Cerámica, una carretera de doble calzada en sentido perpendicular a la costa destinada a enlazar de manera directa Onda y l’Alcora con Castelló y el puerto. «El gran eje logístico que facilite la conexión de la industria cerámica», destacó.

La mesa contó también con la participación del director de la cátedra de Transformación del Modelo Económico de la UJI, Luis Martínez, quien repasó los antecedentes del sector en las décadas precedentes y advirtió de los cambios que experimenta el clúster a raíz de la entrada de capital extranjero y fondos de inversión a las empresas. «Esto hará evolucionar a algo diferente y unos cambios a los que no estábamos habituados», destacó.

Vertiente laboral

El debate también habló de empleo. Por un lado, el secretario general de Ascer cifró en 2.000 los empleos perdidos en el último año, por lo que de 17.000 trabajos directos se ha pasado a 15.000. Además, varios de los ponentes hablaron de la dificultad de encontrar a asalariados jóvenes y con una formación reglada. Indicaron que este colectivo de población ha dejado de tener interés por la industria, lo que se une al envejecimiento de la población española.