INDUSTRIA

La propietaria de Keraben Grupo y Saloni toma medidas en Castellón

Victoria anuncia a los accionistas una «reorganización»
Exterior de la planta de Keraben, en Nules.
Bartomeu Roig

Victoria, el grupo propietario de Keraben Grupo y Saloni, ha dado a conocer a sus accionistas los objetivos para los próximos meses, que incluye a las fábricas españolas de cerámica, situadas en Castellón. La compañía explica una «reorganización» dentro de «un proyecto de gran envergadura que implica una inversión en las fábricas españolas y la optimización de la producción» que tardará 18 meses en completarse, y que espera tenga efecto en las cuentas de resultados a partir de 2027.

«La primera fase se entregará a mediados del ejercicio fiscal 2026 y tendrá un impacto positivo en los ingresos y el flujo de caja de ese año, pero el beneficio total se verá el año siguiente y se espera que mejore los ingresos en 16-19 millones de libras (entre 19 y 23 millones de euros), en función de las condiciones actuales del mercado», apunta el comunicado.

Acciones pasadas

Este anuncio llega después de que la división cerámica de Victoria redujera un 40% su beneficio en el pasado ejercicio, y se tomaran decisiones como la apuesta por comprar una factoría turca (Graniser) y cerrar la planta de Saloni, con 150 despidos.

En lo referente al balance económico del último ejercicio, las cuentas de Victoria no desgranaron al detalle los resultados de España, pero sí hicieron referencia a la actividad de la división cerámica, en la que España (y Castellón) tienen un peso fundamental. El ebitda (beneficios antes de impuestos, depreciaciones y amortizaciones) bajó un 43%. «Son unas cifras más débiles frente a un año fiscal 23 muy sólido, cuando el crecimiento orgánico superó el 20%», detallaron desde la compañía.

En el horizonte tienen puestas esperanzas en Estados Unidos, en referencia al procedimiento iniciado contra India por una presunta competencia desleal. «El gobierno iniciará una investigación y prevé un resultado favorable este año», afirman. Recuerdan que en abril de 2024 «la industria presentó peticiones antidumping y antisubvenciones con el gobierno de Estados Unidos, buscando la imposición de aranceles sustanciales, estimados entre 408% y 828%», si bien las primeras resoluciones distan mucho de estos porcentajes, al limitarse a apenas un 3%. Además, afirman que se espera «una solicitud similar ante la Comisión Europea».