La transformación de una vivienda de 1912 en una casa rural de lujo en un pueblo de Castellón

Franceses, alemanes, holandeses... Turistas de toda Europa, además de nacionales, procedentes mayoritariamente de las provincias de Valencia, Zaragoza y Madrid, han pasado en el último año por un municipio de menos de 800 habitantes situado en la comarca del Baix Maestrat. ¿El motivo? Alojarse en una vivienda construida a principios del siglo XX transformada en un inmueble de lujo con todas las comodidades del siglo XXI.

Los artífices de la iniciativa son una pareja de emprendedores que no dudó en perseguir su sueño de gestionar un negocio como el que ahora tiene en marcha en la localidad donde están sus raíces, Santa Magdalena. «Hemos transformado un inmueble familiar de 1912 en un alojamiento de cuatro estrellas y capacidad para ocho personas», afirma Elena Cid, gerente de este negocio situado en territorio rural, que lleva mano a mano junto a su pareja, José María Borrás.

«Me crié en Barcelona, pero mis orígenes maternos se sitúan aquí. He podido disfrutar toda la vida de mis veranos con mis abuelos y siempre he sentido una gran estima por mi pueblo», recuerda Elena. Un cariño por la tierra que comparte con José María, también con vínculos con la localidad. Contaban con un alojamiento cerrado desde hacía años en el centro del pueblo y pensaron en las oportunidades de negocio que les ofrecía.

Así abrió sus puertas La Casa del Carrer Major. «Era el nombre con el que se conocía a nivel familiar el inmueble, porque está situada en esa calle, ya que tenían otras por el pueblo», recuerda Elena. El alojamiento dispone de tres habitaciones dobles con un baño privado cada una de ellas y todo tipo de detalles para disfrutar de una estancia de lujo en un alojamiento que mantiene su esencia.

Y la acogida desde su apertura en junio del 2022 no ha podido ser mejor: «Aunque en verano recibimos la mayoría de huéspedes, en otoño e invierno contamos con largas estancias y ahora mismo hay una pareja de francesas que se quedarán más de 20 días en la vivienda de alquiler».

Pero llegar hasta aquí no ha sido un camino de rosas para estos emprendedores. El primer paso fue contactar con el Ayuntamiento de Santa Magdalena, «donde se entusiasmaron con el proyecto», y les remitieron al Grupo de Acción Local (GAL) Maestrat-Plana Alta. «Después de unos meses de trabajo, optamos a una subvención que nos permitió financiar gran parte de la reforma que necesitaba nuestra casa para iniciar la actividad», señala.

Fue un tiempo en el que la burocracia, siempre farragosa, no logró hacerles tirar la toalla y ello fue posible gracias a la ayuda de cerca de 60.000 euros recibida. De este modo, pudieron materializar las obras para restaurar el inmueble, cuidando todos los detalles. «Queríamos recrear la vivienda original, de la época modernista, y lo hemos conseguido; incluso el color de la puerta mantiene el color original tras la restauración del inmueble», explica Elena.

Turistas de toda Europa y distintos puntos de España ya se han alojado en esta joya restaurada. Mediterráneo

Futura rehabilitación

Tras la buena acogida de la iniciativa (han recibido a cientos de personas hasta la fecha), lo que contribuye a la dinamización del pueblo, esta pareja ya está pensando en rehabilitar otro inmueble con el mismo fin. «Se encuentra en la parte trasera de La Casa del Carrer Major y la idea sería hacer una zona entre ambas con una pequeña piscina para refrescarse», detalla esta emprendedora. «De hecho, ya estamos esperando que salga una nueva convocatoria de ayudas Leader, prevista para el 2024, para iniciar la aventura de abrir otro alojamiento rural», adelanta.