CERÁMICA Compra de Baldocer: veredicto de la agencia de calificación Fitch
16 octubre 2023 10:22
Es uno de los últimos movimientos de impacto en la industria cerámica de Castellón. Tras más de un año de rumores, la multinacional mexicana Lamosa, el segundo productor de este tipo de materiales a nivel mundial, daba a conocer el acuerdo para la compra de una de las empresas más importantes del sector en la provincia, Baldocer, considerada como una de las firmas del selecto top 5 del azulejo español, tanto por su capacidad de producción como por su adaptación las nuevas tendencias y una gestión empresarial basada en un escaso nivel de deuda.
Para lograr la firma, que ahora está pendiente de las aprobaciones legales usuales en este tipo de transacciones, Lamosa ha aprobado un pago mínimo de 425 millones de euros. De esta cantidad, 354 millones se abonarán en una primera fase, mientras que en el 2025 se entregará un mínimo de 71 millones. Una cantidad que podría incluso ser superior en función de los resultados de Baldocer.
Lamosa es una compañía que opera en la bolsa de México, por lo que sus novedades están observadas con lupa. Ahora, la agencia de calificación Fitch, una de las compañías dedicadas a analizar la salud financiera de las empresas en función del riesgo que supone invertir en ellas,ha dado su visto bueno a la operación. La opinión de Fitch Ratings pone de manifiesto que la compra de la azulejera castellonense no incrementa los riesgos para Lamosa, por lo que mantiene su calificación crediticia a largo plazo con nota de AA y perspectiva estable.
Para llevar a cabo la adquisición, los nuevos dueños de Baldocer han tenido que recurrir al endeudamiento. Aun así, desde Fitch se apunta a que Lamosa cuenta con un «perfil crediticio conservador, caracterizado por niveles de deuda controlados y márgenes de rentabilidad buenos, que han dado como resultado una generación consistente de flujo de fondos libre positivo».
Entre los puntos fuertes del acuerdo está su mejora en el posicionamiento dentro del mercado europeo, lo que es una oportunidad de crecimiento fuera de México. Además, destaca el catálogo de productos de gama alta del que dispone Baldocer, especialmente en el segmento del gran formato.
Pese a estas apreciaciones favorables, el análisis de Fitch pone de manifiesto algún interrogante. Afirma que podrían «presentarse algunos retos en el corto plazo debido a la dinámica actual del mercado en Europa y la desaceleración de la demanda en Estados Unidos», además de las particularidades que tiene el «comportamiento cíclico de la industria de la construcción». Con Baldocer, Lamosa crecerá un 12% en capacidad de producción al año.
La venta de Baldocer, empresa fundada hace casi tres décadas por Felipe Peraire, fue uno de los asuntos más comentados en la feria Cersaie de Bolonia. Una vez sea oficial todo el procedimiento de adquisición, su dueño hasta ahora dejará de tener la máxima responsabilidad, aunque en declaraciones a ‘Mediterráneo’ señaló que seguirá en contacto con la empresa, al menos durante dos años, para emprender el proceso de transición. Además, está previsto que Baldocer mantenga su marca y tenga una gestión independiente respecto a la otra inversión de Lamosa en España, la firma de cerámica de Roca en la Vall d’Uixó, adquirida en el 2021.
Peraire apuntó a que la relación entre las dos empresas irá por separado, con la excepción de sinergias, como podría ser la fabricación de láminas de gran formato. Un producto del que Baldocer ya tiene líneas de producción. Las próximas semanas serán claves para establecer los cambios en el día a día de la firma.
Es uno de los últimos movimientos de impacto en la industria cerámica de Castellón. Tras más de un año de rumores, la multinacional mexicana Lamosa, el segundo productor de este tipo de materiales a nivel mundial, daba a conocer el acuerdo para la compra de una de las empresas más importantes del sector en la provincia, Baldocer, considerada como una de las firmas del selecto top 5 del azulejo español, tanto por su capacidad de producción como por su adaptación las nuevas tendencias y una gestión empresarial basada en un escaso nivel de deuda.
Para lograr la firma, que ahora está pendiente de las aprobaciones legales usuales en este tipo de transacciones, Lamosa ha aprobado un pago mínimo de 425 millones de euros. De esta cantidad, 354 millones se abonarán en una primera fase, mientras que en el 2025 se entregará un mínimo de 71 millones. Una cantidad que podría incluso ser superior en función de los resultados de Baldocer.
Lamosa es una compañía que opera en la bolsa de México, por lo que sus novedades están observadas con lupa. Ahora, la agencia de calificación Fitch, una de las compañías dedicadas a analizar la salud financiera de las empresas en función del riesgo que supone invertir en ellas,ha dado su visto bueno a la operación. La opinión de Fitch Ratings pone de manifiesto que la compra de la azulejera castellonense no incrementa los riesgos para Lamosa, por lo que mantiene su calificación crediticia a largo plazo con nota de AA y perspectiva estable.
Para llevar a cabo la adquisición, los nuevos dueños de Baldocer han tenido que recurrir al endeudamiento. Aun así, desde Fitch se apunta a que Lamosa cuenta con un «perfil crediticio conservador, caracterizado por niveles de deuda controlados y márgenes de rentabilidad buenos, que han dado como resultado una generación consistente de flujo de fondos libre positivo».
Entre los puntos fuertes del acuerdo está su mejora en el posicionamiento dentro del mercado europeo, lo que es una oportunidad de crecimiento fuera de México. Además, destaca el catálogo de productos de gama alta del que dispone Baldocer, especialmente en el segmento del gran formato.
Pese a estas apreciaciones favorables, el análisis de Fitch pone de manifiesto algún interrogante. Afirma que podrían «presentarse algunos retos en el corto plazo debido a la dinámica actual del mercado en Europa y la desaceleración de la demanda en Estados Unidos», además de las particularidades que tiene el «comportamiento cíclico de la industria de la construcción». Con Baldocer, Lamosa crecerá un 12% en capacidad de producción al año.
La venta de Baldocer, empresa fundada hace casi tres décadas por Felipe Peraire, fue uno de los asuntos más comentados en la feria Cersaie de Bolonia. Una vez sea oficial todo el procedimiento de adquisición, su dueño hasta ahora dejará de tener la máxima responsabilidad, aunque en declaraciones a ‘Mediterráneo’ señaló que seguirá en contacto con la empresa, al menos durante dos años, para emprender el proceso de transición. Además, está previsto que Baldocer mantenga su marca y tenga una gestión independiente respecto a la otra inversión de Lamosa en España, la firma de cerámica de Roca en la Vall d’Uixó, adquirida en el 2021.
Peraire apuntó a que la relación entre las dos empresas irá por separado, con la excepción de sinergias, como podría ser la fabricación de láminas de gran formato. Un producto del que Baldocer ya tiene líneas de producción. Las próximas semanas serán claves para establecer los cambios en el día a día de la firma.