INDUSTRIA La ley de cambio climático exime a la cerámica de pagar por emisiones de CO2 a la atmósfera
03 noviembre 2022 13:18
La cerámica no solo sufre por los costes energéticos, también lo hace por las nuevas normas que pueden gravar la competitividad del sector. Una de ellas es la ley de cambio climático que ultima Les Corts, y que iba a suponer un aumento de los gravámenes, por la propuesta de pagar por las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Al final, la comisión de Medio Ambiente en el parlamento autonómico ha optado por aprobar, sin votos en contra, una enmienda presentada por el PSPV, de modo que excluyen al azulejo mediante una bonificación de hasta el 100% del futuro impuesto, al considerar que las empresas ya realizan elevados esfuerzos para reducir emisiones. La propuesta salió adelante gracias al voto a favor de socialistas y Compromís, además de Ciudadanos, mientras que Unides Podem, el Partido Popular y Vox se abstuvieron.
El portavoz socialista de Medio Ambiente en Les Corts, David Calvo, celebró su aprobación y destacó que «el sector está cumpliendo y asumiendo compromisos medioambientales», para añadir que las empresas cerámicas «han dado muchos pasos para combatir el cambio climático, como por ejemplo adaptando sus instalaciones», por lo que consideran «innecesario un aumento de esa presión».
Además, el parlamentario recordó que «el sector está sometido al régimen de emisiones de efecto invernadero, por lo que ya viene concienciado de casa».
En cuanto al espíritu de la nueva norma, David Calvo expuso que pretenden concienciar antes que sancionar, y puntualizó que desde las filas socialistas cumplen su palabra y apuestan «por aliviar la carga fiscal sobre las empresas cerámicas», manifestó.
Escollo
La carga fiscal a empresas como las azulejeras, uno de los últimos escollos para que la ley pase por su aprobación definitiva en el pleno de Les Corts, había generado fricciones entre los socios del Botànic, ya que los socialistas presentaron en solitario la enmienda tratada en la comisión. Finalmente, PSPV y Compromís llegaron a un acuerdo que, según el portavoz adjunto de la coalición Vicent Marzà, «beneficia a quien apueste por inversiones potentes en la mejora de la eficiencia energética y, por tanto, esté trabajando en la línea que marca esta ley».
Tras la Junta de Síndiques, Marzà destacó que la industria cerámica de Castellón «está sufriendo muchísimo el aumento del precio del gas y necesita tener a las administraciones a su lado». Por eso, han alcanzado este acuerdo que beneficia a empresas como las del sector de la cerámica.
La cerámica no solo sufre por los costes energéticos, también lo hace por las nuevas normas que pueden gravar la competitividad del sector. Una de ellas es la ley de cambio climático que ultima Les Corts, y que iba a suponer un aumento de los gravámenes, por la propuesta de pagar por las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Al final, la comisión de Medio Ambiente en el parlamento autonómico ha optado por aprobar, sin votos en contra, una enmienda presentada por el PSPV, de modo que excluyen al azulejo mediante una bonificación de hasta el 100% del futuro impuesto, al considerar que las empresas ya realizan elevados esfuerzos para reducir emisiones. La propuesta salió adelante gracias al voto a favor de socialistas y Compromís, además de Ciudadanos, mientras que Unides Podem, el Partido Popular y Vox se abstuvieron.
El portavoz socialista de Medio Ambiente en Les Corts, David Calvo, celebró su aprobación y destacó que «el sector está cumpliendo y asumiendo compromisos medioambientales», para añadir que las empresas cerámicas «han dado muchos pasos para combatir el cambio climático, como por ejemplo adaptando sus instalaciones», por lo que consideran «innecesario un aumento de esa presión».
Además, el parlamentario recordó que «el sector está sometido al régimen de emisiones de efecto invernadero, por lo que ya viene concienciado de casa».
En cuanto al espíritu de la nueva norma, David Calvo expuso que pretenden concienciar antes que sancionar, y puntualizó que desde las filas socialistas cumplen su palabra y apuestan «por aliviar la carga fiscal sobre las empresas cerámicas», manifestó.
Escollo
La carga fiscal a empresas como las azulejeras, uno de los últimos escollos para que la ley pase por su aprobación definitiva en el pleno de Les Corts, había generado fricciones entre los socios del Botànic, ya que los socialistas presentaron en solitario la enmienda tratada en la comisión. Finalmente, PSPV y Compromís llegaron a un acuerdo que, según el portavoz adjunto de la coalición Vicent Marzà, «beneficia a quien apueste por inversiones potentes en la mejora de la eficiencia energética y, por tanto, esté trabajando en la línea que marca esta ley».
Tras la Junta de Síndiques, Marzà destacó que la industria cerámica de Castellón «está sufriendo muchísimo el aumento del precio del gas y necesita tener a las administraciones a su lado». Por eso, han alcanzado este acuerdo que beneficia a empresas como las del sector de la cerámica.