La limpieza deja a la vista la fachada de hormigón del edificio incendiado de Campanar
La primera planta del edificio ha quedado libre de escombros ya
- La limpieza del edifificio de Campanar elimina la capa de humo negro de la fachada
Las tareas de desescombro y limpieza del edificio incendiado en febrero el barrio nuevo de Campanar, que comenzaron a principio de la semana pasada, avanzan “a buen ritmo” y ya ha finalizado la limpieza de la fachada y el desescombro de las viviendas de la primera planta. La empresa encargada de la limpieza ha informado a la Asociación de Propietarios (Aproicam), de que la fachada está “prácticamente limpia”, según informó su vicepresidente, Fran Fernández, a Efe. El uso de agua a presión e hidrolimpiadoras industriales ha permitido eliminar en buena medida el humo negro que cubría la estructura dejando el hormigón de color claro, y a aparente buen estado, a la vista.
La limpieza de la estructura del edificio, que será reconstruido con un diseño totalmente diferente, se hace en paralelo al desescombro de las viviendas. Ya se da por concluido el de la primera planta del bloque residencial que fue devorado por las llamas hace seis meses, el pasado 22 de febrero, un siniestro que dejó diez personas fallecidas, mientras que un centenar de familias quedaron sin hogar.
El pasado 2 de septiembre comenzaron oficialmente las labores de desescombro del edificio ubicado en el número 2 de la calle Poeta Rafael Alberti de València, compuesto por dos torres con 138 viviendas, como paso previo a la futura reconstrucción del inmueble, ya que no hay daños en la estructura que impidan rehabilitarlo.
La empresa Giticsa es la encargada de la retirada de los escombros de las viviendas, la zona común y la piscina, donde se acumulan miles de toneladas entre pavimentos, carpintería metálica, vidrios de ventanas y balcones, cabinas de ascensores y restos de la fachada ventilada, y de limpiar la lana de roca adherida a la fachada.
Está previsto que estas tareas se desescombro del edificio de Campanar se prolonguen a lo largo de cuatro meses y cuentan con un presupuesto de 1,5 millones de euros, que asumen las aseguradoras.
Estas tareas de limpieza y desescombro se desarrollan de forma paralela a la redacción del proyecto de reconstrucción del edificio, que se adjudicó el pasado mes de julio al despacho de arquitectura Arqueha, que diseñó también la torre Ikon de València, obra póstuma de Ricardo Bofill.
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