El sector cogenerador español ha dado al Gobierno un ultimátum para fijar en el plazo de un mes la fecha para la celebración en 2024 de las subastas de 1.200 megavatios (MW), pendientes desde hace dos años, con el objetivo de evitar que siga habiendo «industrias en riesgo».
En una rueda de prensa para presentar un informe sobre la situación de la cogeneración, el presidente de Acogen, Rubén Hernando, destacó la importancia de la convocatoria de estas subastas -que cifran que movilizarían unos 800-1.000 millones de euros- para que el sector pueda «continuar con el proceso de transición de las plantas». «Esperamos que no se haga más allá de en un mes», dijo.
El director general de Acogen, Javier Rodríguez, estimó que fijar ese calendario para las subastas, anunciadas en 2021, es una «una decisión política» que corresponde «enteramente» al Gobierno y advirtió de que si «no se anuncia pronto se perderá este año y seguirá habiendo industrias en riesgo». «Ahora lo que toca es priorizar la industria, todo lo que sea política energética asociada a la industria. Si no es así se va ir viendo caer industrias», añadió al respecto.
En este sentido, la cogeneración, sector que afecta al 20% del PIB industrial español en industrias como la alimentaria, química, papelera, cerámica, textil o automóvil, entre otras, espera estas subastas como un factor «clave» para evitar un retroceso industrial severo en España y para poder movilizar inversiones industriales que impulsen la eficiencia, flexibilidad, digitalización y descarbonización en una transición energética con competitividad industrial.
La nueva metodología de retribución, «inminente»
Además, Hernando valoró la «inminente» promulgación de la nueva metodología de retribución regulada a la operación de la cogeneración como un «avance estructural importante» que permitirá al sector realizar una mejor y más eficaz gestión en los mercados de su producción energética e industrial.
A este respecto, Rodríguez, consideró que el sector «necesita un nuevo ciclo de inversión, ya que no hay otra alternativa». «Si no es así afrontamos un severo retroceso industrial en el país», añadió.
También el sector cogenerador urge al Gobierno a prorrogar la vida dos años a las empresas que cumplen el final de vida útil para que puedan alcanzar a invertir sin paradas forzadas.
El 25% de la cogeneración no recibe retribución regulada
Y es que los cogeneradores estimaron que afrontan la etapa «más difícil de su historia», fundamentalmente por problemas asociados a retrasos regulatorios y por la falta de apoyo en las políticas energéticas y climáticas para sus industrias. Así, el 25% de la cogeneración no recibe retribución regulada y ha dejado de ser retribuida por sus valiosas aportaciones a los sistemas energéticos y al país. Esta cifra de afectación en algunas comunidades como Cataluña se eleva al 40% del sector.
Asimismo, la falta de convocatorias de subastas para la cogeneración -desde 2012- ha abocado a que las plantas en operación hayan ido alcanzando el final de su vida útil (25 años) y que en apenas dos años el 40% de los cogeneradores esté en «grave riesgo» de deslocalización.
Según los datos del sector, la cogeneración en España ha retrocedido un 45% en el periodo 20219-2023, pasando de producir el 11% de la electricidad nacional al 6,5%.
Más del 60%, pymes
Por otra parte, el informe -realizado por las asociaciones sectoriales Acogen, ADAP, y Cogen España-, que reúne la gestión actual en mercados energéticos y transformación digital de 174 cogeneraciones, que suman 3.124 MW -80% de la capacidad actual en funcionamiento- en 79 grupos empresariales industriales con más de 100.000 empleos directos, destaca que más del 60% de las empresas industriales que cogeneran son pymes y el 77% de la producción compite multinacionalmente.
El estudio también recoge la estructura y prácticas actuales de gestión en los mercados energéticos de las principales empresas de los sectores industriales cogeneradores, desde cómo compran combustibles y CO2, venden electricidad, su flexibilidad operativa, la retribución regulada o la gestión de riesgos energéticos, entre otros.
En lo que se refiere a la propuesta de nueva metodología regulada, las empresas puntúan la propuesta con un 3,4 sobre 5. El 52% de las empresas la valoran como buena (49%) o muy buena (3%). Un 35% la califica como regular y el 9% de mala o muy mala.
En el caso de la transformación digital de la cogeneración, es importante o muy importante para el 81% de las empresas (95% de la potencia).