Desde el 1 de enero ha entrado en vigor una normativa en materia de tiempos de conducción y descanso y utilización del tacógrafo, que obliga a los transportistas a llevar a bordo de sus vehículos los registros de sus últimos 56 días, frente a los 28 actuales.
Se trata de una medida incluida en el denominado Paquete de Movilidad que aprobó la Unión Europea en 2020, y que incluyó diferentes medidas legales destinadas, entre otras, a un mejor control del dumping social en el sector del transporte por carretera y a limitar el fenómeno de la deslocalización irregular de empresas de transporte hacia países con menores costes laborales y fiscales.
La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) recuerda que no todas las novedades incluidas en el Paquete de Movilidad se pusieron en marcha a la vez, sino que cada norma legal incluyó diferentes fechas de aplicación en función de la necesidad de conceder un plazo transitorio de adaptación a las nuevas regulaciones introducidas.
Así, cuando un conductor conduzca un vehículo equipado con un tacógrafo analógico, estará obligado a mostrar, a requerimiento de los agentes de control, tanto las hojas de registro (discos diagramas) del día en curso y las utilizadas por el conductor en los 56 días anteriores, la tarjeta de tacógrafo digital si posee una, y cualquier registro manual o documento impreso realizados durante dicho período.
Si el conductor lleva un vehículo equipado con un tacógrafo digital, deberá mostrar su tarjeta de conductor, así como cualquier registro manual o documento impreso realizados durante el día en curso y los 56 días anteriores, y las hojas de registro correspondientes al mismo período en el caso de que hubiera conducido un vehículo dotado con un tacógrafo analógico en ese periodo.
Fenadismer recomienda que los transportistas revisen que su capacidad es suficiente para almacenar dicho período de tiempo
Aunque no se sancionará hasta el 1 de marzo, Fenadismer recomienda que los transportistas revisen que su capacidad es suficiente para almacenar dicho período de tiempo, dado que el nuevo tacógrafo genera un mayor volumen de datos a registrar, debiendo en caso contrario solicitar la emisión de una nueva tarjeta de segunda generación en su comunidad autónoma, por lo que mientras se produce su sustitución deberán conservar dichos datos de forma manual mediante la impresión de los correspondientes tickets.
Since January 1, regulations have come into force regarding driving and rest times and the use of the tachograph, which requires transporters to carry records of their last 56 days on board their vehicles, compared to the current 28.
This is a measure included in the so-called Mobility Package approved by the European Union in 2020, which included different legal measures aimed, among others, at better controlling social dumping in the road transport sector and limiting the phenomenon of irregular relocation of transport companies to countries with lower labour and tax costs.
The National Federation of Transport Associations of Spain (Fenadismer) recalls that not all the new features included in the Mobility Package were implemented at the same time, but that each legal regulation included different application dates depending on the need to grant a transitional period of adaptation to the new regulations introduced.
Thus, when a driver drives a vehicle equipped with an analogue tachograph, he or she must show, at the request of the control officers, both the record sheets (diagram discs) for the current day and those used by the driver in the previous 56 days, the digital tachograph card if he or she has one, and any manual record or printed document made during that period.
If the driver drives a vehicle equipped with a digital tachograph, he or she must show his or her driver card, as well as any manual record or printed document made during the current day and the previous 56 days, and the record sheets for the same period if he or she has driven a vehicle equipped with an analogue tachograph in that period.
Although the sanction will not be imposed until 1 March, Fenadismer recommends that transporters check that their capacity is sufficient to store this period of time, given that the new tachograph generates a greater volume of data to be recorded, and otherwise they must request the issuance of a new second-generation card in their autonomous community, so while its replacement takes place they must retain said data manually by printing the corresponding tickets.