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Abdul, el obrero que ‘se salvó’ de la tragedia del edificio en Madrid: «Eso debería haber estado apuntalado»

Un hombre que había pedido trabajo en el edificio hacía 15 días apunta a una posible «irresponsabilidad» en el apuntalamiento de la estructura

07.05.2024 21:00

Sobre las 11.00 de este martes, mientras los obreros trataban de asegurar el forjado de la planta superior de un edificio en obras en el distrito de Fuencarral de Madrid, parte de esta se ha derrumbado. Una primera losa de aproximadamente 8 toneladas de peso se ha precipitado hacia abajo, golpeando y arrastrando en su camino a otra de cerca de 2.000 kilos y atrapando a dos trabajadores bajo los escombros. Un tercer hombre ha conseguido escapar con una fractura en la pierna y múltiples contusiones, y ha sido trasladado de urgencia al Hospital de la Paz.

Pese al ingente dispositivo puesto en marcha, con cerca de 50 efectivos de Bomberos, Policía Municipal y Samur Protección Civil, además del equipo de drones operado por los agentes locales y varias grúas de alto tonelaje, los trabajos se alargaron durante varias horas debido al riesgo de derrumbre del edificio. «Las labores son muy complicadas, ya que se trata de mucho peso en plantas altas, y requieren del apoyo de maquinaria pesada y de material específico de Bomberos para rescates en estructuras colapsadas», ha explicado José Luis Egido, supervisor de guardia de Bomberos de Madrid, quien ha advertido de que prevén unos «trabajos lentos» ya que están «maximizando la seguridad de los intervinientes».

Antes de este fuerte despliegue, los primeros en llegar al lugar del siniestro fueron los trabajadores de otro edificio en obras situado muy cerca. «Escuchamos el ruido, un estruendo terrible y salimos corriendo a ver qué pasaba», cuenta José a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. Él y sus compañeros fueron inmediatamente desalojados, pero tuvieron tiempo de ser testigos de cómo había quedado el forjado vencido sobre la planta inferior.

Mientras los operarios se afanaban por lograr su objetivo lo antes posible, en los alrededores se agolpan decenas de curiosos ansiosos por saber qué ha ocurrido. Uno de ellos, Abdul, relata que hace menos de 15 días fue a pedir trabajo en el edificio accidentado este martes. «Me dijeron que cuando despejasen todo y empezasen a poner ladrillos me llamaban», asegura con palpable alivio.

Con 62 años de vida y 25 de experiencia en la obra a sus espaldas, afirma que no le extraña lo ocurrido, ya que «todo eso debería haber estado apuntalado con pilotes». A su juicio, se trata de una «irresponsabilidad» que no lo estuviese, pues se trata de «un edificio viejo» en el que «te puedes encontrar hierro en mal estado, partes afectadas por el agua u otros problemas».

En los rostros de los trabajadores de la obra afectada, que a lo largo de la mañana han ido saliendo a cuentagotas de la zona delimitada por la policía, se podía leer claramente que estaban muy afectados por lo ocurrido a sus compañeros. Todos han rechazado hacer declaraciones a los medios, excepto uno, Hassan, que en el momento del accidente se encontraba trabajando con una máquina frente al inmueble.

«Ha sido un terror, yo solo pensaba en mis compañeros por si podía ayudarlos, pero los dos que están bajo el forjado están muertos», ha señalado el trabajador a los periodistas en las inmediaciones del edificio. Según Hassan, los dos fallecidos eran un nigeriano de 53 años, llamado Ngolo, y un colombiano que rondaba la treintena. El tercer hombre que ha resultado herido y trasladado al hospital también se llamaba Hassan.

Según el relato del obrero, en ese momento estaban apuntalando el forjado y el desplome ha provocado que se viniese abajo una de las plantas superiores del edificio, cuyos restos han caído encima de los atrapados y el herido, que se encontraban en otra planta inferior. «Ha habido un ruido estremecedor, toda la gente mirando desde afuera de la calle. Muy mal, lo pasamos mal», ha lamentado Hassan, antes de añadir que «gracias a dios que no ha caído más».

Ayuntamiento y Gobierno investigarán lo sucedido

Aunque por el momento se desconocen las causas del siniestro, el Ayuntamiento de Madrid ha anunciado que va a investigar lo sucedido. «En estos momentos estamos mirando las licencias para comprobar que todo esté en regla. No cabe aventurar ninguna conclusión por ahora en ese sentido pero estamos comprobando desde el punto de vista urbanístico las licencias y el procedimiento administrativo seguido para poder empezar la ejecución de estas obras», ha señalado esta mañana desde el lugar de los hechos el alcalde, José Luis Martínez-Almeida.

El inmueble en cuestión, situado en el número 8 de la calle de Lezama, en su confluencia con la calle de Llodio, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, estaba siendo rehabilitado por la empresa Dema Demoliciones en el marco de un proyecto residencial para Acciona. Hasta el año pasado albergaba el Centro Médico Mapfre Salud Lezama, cuyos pacientes fueron trasladados a finales de 2023 al Centro Médico en el barrio de Las Tablas, ubicado en la calle de Boadilla del Camino, 2, en el mismo distrito.

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