Fernando Roig: «A la clase política le pido que nos deje trabajar»
Avanza que la firma acabó el 2022 con «beneficios parecidos» a los del año anterior
- Fernando Roig, en la presentación de la planta junto a Jorge Arévalo, CEO de eCombustible Energy LLC. Erik Pradas
Además de presentar su proyecto de hidrógeno, el presidente del grupo Pamesa, Fernando Roig, respondió a preguntas sobre otros temas de actualidad, como la situación política, marcada por la victoria del PP en la Comunitat y las generales anticipadas. Fernando Roig afirmó que a los políticos «lo único que les pido es que nos dejen trabajar y apoyen al empresariado».
«Aquí parece que el político es el jefe, cuando un político es un empleado de la sociedad, de aquellos que pagamos los impuestos, y ellos tienen que estar siempre al servicio nuestro, no nosotros al servicio de ellos», comentó.
Sobre el papel de los empresarios, aseguró lo siguiente: «Somos los que creamos riqueza, nosotros pagamos impuestos y nos sentimos orgullosos de pagarlos, y lo que tienen que hacer los políticos es que yo me sienta orgulloso de la forma de repartir, que no me pongan trabas ni palos en las ruedas».
Balance del Grupo Pamesa en 2022
Preguntado por el balance económico del Grupo Pamesa en el 2022, un año marcado por el incremento de los costes energéticos, Fernando Roig comentó que en breve aportará el detalle de los números, pero avanzó que los resultados «son buenos, parecidos al año anterior, a pesar de la factura del gas».
El responsable del principal productor de cerámica de Europa mencionó que el coste energético del pasado ejercicio «fue de 350 millones de euros, más del 30% de toda la facturación», que fue de unos 1.000 millones de euros. Incluso defendió que con el hidrógeno «no tendremos que pagar derechos de emisión de CO2, que ahora está a más de 80 euros la tonelada».
Para hacer frente a la situación, todo el sector se vio obligado a subir precios. «Con este aumento hemos vendido más en euros, en metros cuadrados un poco menos, y el beneficio es parecido». Según el balance del 2021, presentado hace ahora un año, los beneficios antes de impuestos fueron de 97 millones de euros.
El pasado ejercicio también estuvo marcado por el cierre temporal de otra de sus atomizadoras, Azuliber, debido a los costes insostenibles del gas y la falta de retribuciones para las instalaciones de cogeneración. «Ahora funciona, aunque con ajustes de la producción en función del mercado, de modo que producimos aquello que vendemos», expresó, ya que el mercado mundial «se ha retraído, y esperamos que se reanime pronto».
Materias primas
Además de la energía, otra de las preocupaciones del sector es la consecución de materias primas, después de las dificultades para obtener arcillas de Ucrania desde el estallido de la guerra. «Cada vez hacemos más inversiones en minas de Teruel», con el fin de obtener unas arcillas «en las que trabajamos para conseguir un nivel de calidad que sea similar a las de Ucrania», detalló el presidente del grupo.
En cuanto a los feldespatos, que es otro elemento fundamental para la cerámica, explicó que importan materiales desde Turquía, y cada vez más desde Marruecos.
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