El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, expresó ayer ser consciente «de la situación que atraviesa» el sector de la cerámica de Castellón y el conjunto de la industria, así como «de la enorme incertidumbre para ellos y sus familias». Por eso, anunció que habrá nuevas medidas para paliar el impacto de los elevados costes energéticos, aunque sin concretar de qué manera se materializarán.
Sánchez hizo estas manifestaciones en Castelló, donde participó en la Cumbre Hipano-Rumana, y después de reunirse con el presidente de la patronal cerámica (Ascer), Vicente Nomdedeu; y el secretario general de la organización, Alberto Echavarría. Un encuentro solicitado en diversas ocasiones por Ascer, en el que también participó el president de la Generalitat, Ximo Puig.
Una sala del aeropuerto de Castellón fue el escenario de esta reunión, hecha con buenas dosis de improvisación, que no fue confirmada hasta última hora de la noche del martes, y mantenida fuera de la agenda de Sánchez. No hubo en esta cita, que duró aproximadamente media hora, representación de las otras dos patas del clúster, formadas por las empresas de esmaltes y las de maquinaria y bienes de equipo. Desde la asociación de fritas y esmaltes, Anffecc, mostraron su convencimiento de que Ascer «ha transmitido la preocupación de todo el clúster».
«Intercambio fluido»
El jefe del Ejecutivo explicó que a lo largo de los últimos años, y especialmente desde el estallido de la guerra en Ucrania, «ha habido un intercambio fluido con la cerámica, y así lo ha hecho la ministra de Industria», Reyes Maroto, a la vez que aseguró haber «hecho muchas cosas, como las rebajas al impuesto del gas, ayudas por valor de 375 millones de euros a empresas gasintensivas, o incluir a la cogeneración dentro de la solución ibérica» del tope para el precio del gas.
«En todo caso, quiero anunciar que el Gobierno va a aprobar nuevas medidas de apoyo para proteger una industria clave para este país», añadió Pedro Sánchez.
Una declaración que no fue acompañada del detalle de esas ayudas, ni de cuándo se pondrán en marcha. Sánchez comentó que pueden «seguir contando con el Gobierno de España». «Les seguiremos protegiendo y vamos a poner todos los recursos del Estado para defender a las familias, las empresas y las industrias», subrayó.
Contactos recientes
A principios de este mes se produjo el último contacto conocido entre la patronal que representa al sector de fabricantes de cerámica y la ministra de Industria. Fue en el transcurso de una visita a València. En los últimos tiempos se han producido otros encuentros con altos cargos del Gobierno, con resultados dispares.
En septiembre manifestaron a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, la necesidad de que las plantas de cogeneración cerámica pudieran tener la ventajas del topado del gas. Una petición atendida, aunque sin lograr los efectos deseados. Además, Ascer y los sindicatos acudieron al Ministerio de Trabajo para pedir una serie de mejoras en las condiciones de los ERTE en el sector, que terminó de una manera infructuosa.
El secretario general de Ascer, Alberto Echavarría, se mostró agradecido por la «predisposición que ha tenido el presidente del Gobierno para atendernos en su visita a Castellón con motivo de la cumbre», aunque especificó: «Entendemos que no podía ser de otra forma considerando el momento que vive el sector y la oportunidad que esta cumbre suponía para mantener el encuentro».
Además, detalló que el jefe del Ejecutivo se mostró «receptivo con la información trasladada, y se ha comprometido a seguir explorando vías de apoyo para el clúster y la industria gasintensiva, así como a continuar trabajando en la búsqueda de las ayudas que solicitamos desde la industria azulejera».
El encuentro contó con la presencia del presidente de la patronal azulejera, Vicente Nomdedeu; y del president de la Generalitat, Ximo Puig; aunque no hubo representación de las otras dos patas del clúster, formadas por las empresas de esmaltes y las de maquinaria y bienes de equipo. Desde la asociación de fritas y esmaltes, Anffecc, mostraron su convencimiento de que Ascer «ha transmitido la preocupación de todo el clúster».
Dudas
La valoración favorable del secretario general de Ascer no oculta las dudas sobre el desarrollo de las nuevas iniciativas para sobrellevar la crisis energética. »Nos preocupan los plazos y la demora en la obtención de las ayudas, más si cabe cuando nuestra competencia más directa hace meses que ya dispone de medidas de apoyo económicas de un volumen considerable». Al mismo tiempo, expuso su inquietud ante el hecho «de que no esté claro todavía cómo se van a instrumentar las ayudas y la cantidad, si bien los límites establecidos en el marco temporal de ayudas de Estado son claros» por parte de la Unión Europea.
Pedro Sánchez expuso que el Gobierno ya ha hecho «muchas cosas» por la cerámica, como las ayudas directas con un tope de 400.000 euros para las empresas gasintensivas. Desde Ascer insisten en que es necesario «aumentar el volumen de las ayudas», y que de nada servirá «replicar el esquema» de los planes de ayudas convocados en los meses de marzo y junio -los RDL 6/22 y 11/22-, que tal y como ya señaló recientemente Mediterráneo, «apenas suman un 1% del sobrecoste energético de este año para el sector».
La ministra de Industria, Reyes Marotó, señaló que las ayudas directas a la cerámica son hasta ahora de 20 millones de euros, mientras que el aumento de los gastos en gas y electricidad ascienden a los 2.600 millones previstos para el 2022. «Es necesario que el sector reciba ayudas por un importe suficiente que permita a las empresas superar esta crisis con los mínimos cierres y la menor pérdida de empleos posible», concluye la patronal.