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El azulejo exige rebajar la factura energética a la ministra Maroto

29.01.2019 09:45

Satisfacción, pero también cautela. Estos dos sentimientos resumen lo expresado por los representantes de las tres sectores del clúster azulejero castellonense (cerámica, fritas y esmaltes y maquinaria) tras reunirse con la ministra de Industria, Reyes Maroto, en la jornada inaugural de Cevisama. La feria valenciana arrancó ayer con más de 120.000 metros cuadrados de exposición y los retos de alcanzar los 100.000 visitantes y servir de palanca de crecimiento a las empresas en un momento de incertidumbre económica.

El presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (Ascer), Vicente Nomdedeu, aseguró tras el encuentro con la titular de Industria que esta había demostrado «sensibilidad» hacia el sector en cuestiones como la energía, las investigaciones antidumping, la creación de un lobi en Europa o la necesidad de seguir en la senda de la internacionalización. Tras estas buenas palabras, Nomdedeu pidió pasar «de los compromisos a los hechos».

En el apartado energético, y después de que Maroto reconociera que el real decreto que el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó para alargar dos años la vida útil de las plantas de cogeneración era solo «una primera medida», los empresarios arrancaron la promesa de que cara al 2020 habrá un marco legal estable. «La ministra ha entendido que el azulejo necesita esta medida para mantener la competitividad respecto a otros países productores», subrayó el presidente de Ascer. También en el mismo sentido, tanto Nomdedeu como Joaquín Font de Mora (Anffecc) y Juan Vicente Bono (Asebec) le exigieron a la ministra una rebaja de los peajes gasísticos y de la factura de la luz.

Maroto, que según varios empresarios consultados sorprendió al venir «con la lección muy aprendida», no realizó ningún anuncio de calado pero sí convocó a los empresarios y a la Generalitat a una segunda reunión en Madrid el 13 de febrero para continuar abordando estas cuestiones. La intención es que esta interlocución tenga continuidad en el tiempo y sea «efectiva».

En el encuentro y la inauguración previa participó también el president de la Generalitat, Ximo Puig, que agradeció a la responsable de Industria su buena predisposición con el sector pero a la que exigió la creación de ese «espacio de diálogo» para reducir los costes energéticos. El jefe del Consell se comprometió a promover una «alianza permanente» con el sector para hacer frente a los «aires proteccionistas» que existen hoy en el mundo, y que se traducen en investigaciones antidumping al Tile of Spain o en el establecimiento de barreras y aranceles al comercio internacional.

También en el plano internacional, la ministra anunció la próxima aprobación --a principios de febrero- de un real decreto que establecerá ayudas a empresas para que costeen sus planes de contingencia para encarar la posibilidad de un brexit duro.

INDUSTRIA FUERTE

Maroto explicó que la intención del Gobierno es que la industria represente el 20% del PIB en el 2030, y dijo que esto pasa entre otras cuestiones por el crecimiento de un sector, el azulejero, del que destacó que es el tercero que más superávit aporta a la balanza comercial española y del que Puig resaltó su apuesta por el diseño, la tecnología y la innovación.