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TAU entra en concurso de acreedores tras cumplir 48 años
La histórica azulejera TAU Cerámica ha entrado en concurso de acreedores. Con 48 años de actividad a sus espaldas, nacida en Castellón en 1967 como Taugres, se ha comprometido con la innovación y, en su día, el patrocinio deportivo, pero ahora su futuro pende de un hilo.
El juzgado de lo Mercantil número 1 de Castellón ha dictado el auto de declaración de la antes conocida como suspensión de pagos de la compañía. Una coyuntura difícil a la que se añaden dos expedientes de regulación de empleo (ERE) en marcha: de extinción y suspensión temporal.
OFERTAS DE COMPRA // Los tribunales aprobaron el pasado 12 de junio la declaración del proceso concursal --el siguiente paso será presentar un plan de pagos--, tras ofrecer la empresa a un fondo inversor, según fuentes sindicales. En este intento infructuoso se dieron hasta seis propuestas de compraventa, siendo una de ellas, la del fondo inversor norteamericano Tensile Capital --que ya adquirió la nulense Keraben--, pero que tampoco prosperó.
En cuanto a los ajustes de personal, estos se vienen dando desde el 2008, hace ya siete años, momento en el que esta industria cerámica llegó a contar con más de mil trabajadores. Los ERE más recientes datan de abril pasado, de extinción, para 31 empleados; y de suspensión temporal para el resto de la plantilla, unos 160, del 15 de mayo al 15 de diciembre del 2015. De hecho, parte del equipo humano se concentró ante las puertas de la empresa contra ese expediente, el séptimo. Solo se salvan de esta reestructuración, de partida momentánea, los comerciales y el personal de cargas.
TAU Cerámica sufrió especialmente la crisis del sector de la construcción, ya que sus ventas estaban concentradas en el mercado nacional, lo que al final ha llevado a presentar el concurso, en opinión de los sindicatos.